sábado, enero 07, 2006

el baile

calle Alameda, Santiago, Chile
Embriagados de música en la calle, camino entre los cuerpos calientes y sudorosos, llenos de noche y agitación, excitados de baile y humedad, roces de sensualidad con música y placer, tres horas de calor. Cuerpos ardientes, llenos de deseo y libertad. La música nos transporta y nos lleva a universos inexplorados.